miércoles, julio 30, 2008

Cambio de Piel.

Un día, muy muy temprano, recibo una invitación de msn para agregar a un contacto nuevo. Yo acepto. Yo siempre acepto. Antes no era así, era mala, desconfiada, una selectiva posesa. Sólo aceptaba e-mails que reconociera o a personas que me enviaran un correo personal. Luego recapacité y empecé a aceptar todas las invitaciones que llegaban (algunas veces muchas, otras veces ninguna, en realidad no sé de qué depende ¿?). Me volví buena, confiada, una chatera absurda (ja, de pronto sólo absurda, en realidad no soy muy chatera). En ese sentido, le di YES a la invitación afecuosa de "Marion" y, como hago desde que me volví buena, confiada y absurda, esperé a que me hable (De mis épocas de mala, desconfiada y selectiva posesa me quedó eso, soy súper creída. Si me invitas, háblame). Y Marion me habló. Me saludó cordialmente en inglés, me contó que era australiana, ama de casa, que acababa de kiss-goodbye al marido. Una housewife en Aussieland. Que lindo, pensé. Yo le dije que tenía algo de sueño, pero que eso era normal en mi, que siempre estaba dormida hasta mediodía por más que estuviera de pie y haciendo cosas, que en realidad me gustaba mucho estar en la cama. Y ahí se jodió todo. Lo siguiente que supe de Marion fue que se le parecía GREAT que me gustara TO STAY IN BED porque ella estaba ALL ALONE en casa y se sentía súper HORNY. Dado que Mrs. Marion había dejado claro que deseaba elevar nuestra madrugadora conversación to the next level, no le respondí nada y la borré de mi msn (Aburrida la Tía Lauris eh?). Como una semana después, haciendo research para unos textos medio místicos que me tocó escribir, me encuentro con una sala de chat en inglés y, dado que los textos que tenía que hacer eran igualmente en english, pues decidí entrar para ver si aflojaba dedos y hacía nacer ideas mientras conversaba con alguien. Entré como "lazafer". Soy malísima para ponerme nombres tipo lonelypuppy123, young&restless001, o nada parecido. O sea, yo creo que todo el mundo piensa que un nombre sencillo ya va a estar tomado por otra persona entonces ocupan horas en crear un nickname larguísimo y a uno le toma una vida escribir ese nick para poder hablarle. Por eso le hablo a personas que tengan nicks cortos y fáciles de tipear, así se llamen pedo o pichi (Y en este caso "Fart" o "Pee"). Prefiero eso a Xx_Kitten_Dolly_HunnyBunny_XX. La cosa es que empiezo a hablar con "Fairy" sobre trivialidades bastante útiles y no sé como llegamos a que a las dos nos gustaba el helado (Claramente era small talk.. ¿A quién no le gusta el helado?). En eso, ella, en un arrebato muy de hada de cuento me dice que ¡Sería lindo si el mundo entero fuera hecho de helado! y yo, que por algún motivo siempre cargo una respuesta inadecuada en el bolsillo, le dije, de la manera más inocente: "Pues si vivieramos en un mundo hecho de helado, lamerse unos a otros ya no sería considerado cochino, no?". Y me dejó. Fairy me dejó sola en nuestra sala de chat. Y muté. Desde ahora, cuando entre a una sala de chat, seré Marion, la horny housewife.

jueves, julio 24, 2008

With a little help from my friends.

Hola, mi nombre es Laura y tengo un blog. Casualmente, hay un concurso de blogs y yo estoy nominada en la categoría 'Blog Personal'. Y nada, quiero ganar. Había pensado usar el speech de 'nunca gané nada en la vida' para conmover a la platea, pero eso no es cierto. Yo he ganado cosas en la vida. Gané un pollito en una tómbola del cole (se murió a la semana porque tenía moquillo), gané una pizza de papa john's (y mi hermano se la comió) y también me gané una barbie hermosa una vez (pero la gané fuera de tiempo, tenía como 24 años y sólo pude presumirla con mi sobrinita). Por otro lado, he ganado concursos de ajedrez, poesía, declamación y ortografía, entonces, sólo me falta ganar un concurso de blogs para graduarme de nerd. Cuento con tu voto.
¿Cómo votar? Fácil.
Entras a mi blog: http://lazafer.blogspot.com/ y en la parte de arriba verás un INMENSO botón de color amarillo (es absurdamente grande, imposible no verlo). Haces click en el botón y llegarás a una página donde podrás votar por el blog. Hay 20 categorías, lo que toca hacer es elegir la de 'Blog Personal' y más abajo escribir tu dirección de e-mail para que luego confirmes el voto.
Y nada más.
Voten por mí compañeros y hagan forward de este e-mail a sus amigos y enemigos. Ah! Y gracias a quien me nominó y avisó de la existencia del concurso para elegir a los 20 mejores blogs del Perú (Tan bonito ese país eh?) .

Besos a todos!

Laura.

martes, julio 22, 2008

May the dialogue never end.

Uno le habla a las cosas. Esto pasa todo el tiempo y las personas no podemos negarlo. La mamita Olga le conversa a la frazadas mientras las acomoda prolíficamente en el "closet de frazadas" (En casa de mis padres en Lima hay un closet para todo). Leo le conversa a las plantitas cuando las riega y también al amigo pollo cuando lo va cortando en trozos (Algo así como cuando el policía le invita un cigarrillo al flaco que está sentado en la silla eléctrica. Just socializing a bit). Estoy segura que todos podemos recordar un momento en el que le hemos hablado a objetos inanimados (o animados tal vez, Dios sabe que esos pollos pueden ser saltarines a la hora a trozarlos). Pero, ¿Qué pasa cuando las cosas dan el primer paso y te hablan antes de que tú lo hagas? No hablo del susurro que se escapa de un abrigo hermoso en un anaquel, o del silbido coqueto que un play station 3 (O ya hay 4? Sorry pero yo jugué un poco de pac-man y ahí quedé. Aunque confieso un oscuro periodo en el que pensaba que Chun-li de Street Figther era muy cool. Volviendo al pac-man... ¿Sóy la única que piensa que "JoyStick" es un nombrecito muy muy nasty para un control? En fin). ¿En qué ibamos? Susurros y silbidos, si. Bueno, la cosa es que yo sostengo que, como los humanos, las cosas también hablan de otras formas, no siempre lindas. Los zapatos chancleteados por ejemplo. Llega un momento en que esos zapatos lindos a los que por algún motivo decidiste darle uso diario y exhaustivo, cuando pensaste que mágicamente combinaban con todo, te hacían ver más espigado, te sacaban cola, te metían panza y no te arruinaban los dedos de los pies, te dicen BASTA. Te dicen, hey, se acabó. No más zapateros, no más lustradas feroces, no más remaches. NO MÁS. Let me go, hon. Y nos cuesta la vida hacerlo, entonces no los botamos sino que los ponemos en el closet "por si acaso", hasta cuando llega ese maléfico y muchas veces postergado día en el que uno tiene que "ordenar" el ropero, los ves de nuevo y te preguntas cómo has podido ponerte ese par de cochinadas en los pies, pero luego recuerdas la fiestita donde fulano y la caminadita con sutano y el bailecito con perencejo (ja, perencejo es una palabra chévere) y no los botas. Esto, que nuestras cosas nos hablen, nos ha pasado a todos, aunque existimos algunos más sensibles que otros que, además de oir a nuestra propiedad, escuchamos lo que tienen que decir las prendas de los demás. Yo tengo ese don (Algunos son políglotas, otros geniales en deportes, yo escucho lo que la ropa tiene que decir. Por algún motivo la Mamita Olga nos contaba La parábola de los talentos over and over again). En casa la ropa me habla y vaya, cómo lo hace. Me pasa en casa con uno de mis roommates (cuyo nombre no será develado porque aún tenemos esperanza de que consiga novia) el cual perdió el olfato en un accidente mientras ayudaba a niños pobres en Somalia y por eso nunca sabe cuando es momento de lavar su toalla de baño. No lo hace por sucio, de hecho es bastante cuidadoso con los detalles y con su aspecto, pero existe en él una disfuncionalidad incomprensible que le impide darse cuenta que se está secando el cuerpo casi con un ser viviente. Y entonces me toca ayudarlo. Así como el ángel Gabriel le anunció a María que estaba embarazada, yo le aviso a mi querido roommie cada vez que su toalla de baño se volvió placenta de gemelos. Y este es un proceso que hemos incorporado a nuestro diario vivir. O sea, él no se molesta cuando le digo que "Lo están buscando en el baño", sino que con toda naturalidad me dice "Qué, ¿Ya te conversó otra vez?". O sea, no hay vergüenzas, ni incomodidades. Es simplemente que los dos hemos comprendido que, bueno, sus toallas tienen mayor afinidad conmigo que con él. El otro día El Colocho (que debo aclarar, no es el dueño de las toallas perfumadas), me dio un beso en la cabeza y me dijo "Tu pañuelito me está conversando". Obviamente lo hizo por fastidiar, porque si mi pañuelito conversara, yo lo sabría. Porque yo tengo un don. ¿Ya?

viernes, julio 11, 2008

Eso que hago cuando no me miras.

Todos tenemos algún tipo de manía "extraña", alguna práctica incomprensible -para otros- que realizamos posesamente pero con un tufillo culposo al saber que aquello que hacemos -de vez en cuando- es absolutamente raro. No hablo de comer chocolate en grandes cantidades sino de esperar a que nadie esté mirando para extasiarse metiendo la mano a la pileta de fondue chocolatoso para luego lamérsela con desparpajo. No hablo de fumar 2o cigarrillos diarios, sino de bajar 12 pisos para poder darle una pitada a uno. No hablo de contratar a las prostitutas que se publicitan en el diario sino de, como hago yo, leer compulsivamente y con desespero toda la sección "ofrecidos sexuales" de cualquier periódico que llegue a mis manos. Ese es mi vicio. Me sumerjo en un desvarío desusado cuando leo las promesas imposibles que publican estas chicas, medianas y grandes que invierten cantidades de dinero que desconozco en su aviso clasificado personal. Puedo estar en un café, en una sala de espera, en el colectivo, en la calle, en cualquier lugar. Si veo un diario lo tomaré y, después de hojearlo un poco, siempre terminaré buscando la sección de avisitos multicolores y entregaré mis ojos al baile fabuloso que significa pasar a saludar a Kassandra Experta, Rosita Salvaje o a Inocente Melanie. Son mis amigas. Me hacen reir. Mientras leo, lo que también hago es anotar los avisos que considero tienen mayor carga creativa y también los que no entiendo (Y si, luego voy y le pregunto a algún amigo que me explique que significa tal o cual cosa. O sea, no me voy a quedar en la ignorancia. ¿No?). Algunas veces mis apuntes son pobres, porque las chicas no se han esforzado en vender su producto y los avisos son más de lo mismo, no hay entusiasmo para redactar algo que invite a llamar por teléfono. O sea, eso del placer extremo y me entrego todita ya está muy usado y nadie lo cree... no, no, esos avisos no me gustan. Aquí les dejo mis últimos apuntes, separados entre los que más me gustaron y los que no entendí. Gracias al diario que me prestaron en el Café Andén de Santa Fé al 5300.
Los más creativos:
  • Priscilla, experta en ORTOgrafía. (En mayúsculas por si no te quedó claro el expertise)
  • Mucamita con garganta profunda te saca el polvito. (Exceleeeente juego de palabras).
  • En mis lolas la turquita y en mi cola vos sabés. (Publicidad de Alto Impacto)
  • Enanita de 30 años, un bocadito de placer. (Nada como destacar las ventajas diferenciales)
  • Recién graduada del cole y experta en lengua. (Para los amantes de las falditas de cuadros).
Los que no entendí:
  • Caro Full Sexo: Tengo depa con frigobar. (¿Qué hace con el frigobar?)
  • Coca. 38 años. Cumplo todas tus hidro-fantasías. (¿Hidro qué? ¿Los ahoga?)
  • Si me ves desnuda soy bonita. (¡Cero Autoestima!)
  • Rusa rubia natural (Podés verificar). (¿Y si verifica y no es rubia... devuelven la plata?)

lunes, julio 07, 2008

Crisis Management.

Echados en la cama, él pasa su mano sobre el vientre de ella, formando círculos.

Y ella pregunta:

"Me estás sobando la panza como a Buda?"

(CUIDADO! TRICKY QUESTION! Si la respuesta es "Si", le estás diciendo gorda. SHAME ON YOU. Y si la respuesta es "No"... ¿Qué le estás queriendo decir? ah? AH? AH?!?!).

Él titubea, respira, traga saliva y responde:

"Es que para mí tú eres como el genio, y te hago así para que me cumplas un deseo".

Conclusión:

Los creativos siempre tienen un recurso que los salva.