martes, julio 22, 2008

May the dialogue never end.

Uno le habla a las cosas. Esto pasa todo el tiempo y las personas no podemos negarlo. La mamita Olga le conversa a la frazadas mientras las acomoda prolíficamente en el "closet de frazadas" (En casa de mis padres en Lima hay un closet para todo). Leo le conversa a las plantitas cuando las riega y también al amigo pollo cuando lo va cortando en trozos (Algo así como cuando el policía le invita un cigarrillo al flaco que está sentado en la silla eléctrica. Just socializing a bit). Estoy segura que todos podemos recordar un momento en el que le hemos hablado a objetos inanimados (o animados tal vez, Dios sabe que esos pollos pueden ser saltarines a la hora a trozarlos). Pero, ¿Qué pasa cuando las cosas dan el primer paso y te hablan antes de que tú lo hagas? No hablo del susurro que se escapa de un abrigo hermoso en un anaquel, o del silbido coqueto que un play station 3 (O ya hay 4? Sorry pero yo jugué un poco de pac-man y ahí quedé. Aunque confieso un oscuro periodo en el que pensaba que Chun-li de Street Figther era muy cool. Volviendo al pac-man... ¿Sóy la única que piensa que "JoyStick" es un nombrecito muy muy nasty para un control? En fin). ¿En qué ibamos? Susurros y silbidos, si. Bueno, la cosa es que yo sostengo que, como los humanos, las cosas también hablan de otras formas, no siempre lindas. Los zapatos chancleteados por ejemplo. Llega un momento en que esos zapatos lindos a los que por algún motivo decidiste darle uso diario y exhaustivo, cuando pensaste que mágicamente combinaban con todo, te hacían ver más espigado, te sacaban cola, te metían panza y no te arruinaban los dedos de los pies, te dicen BASTA. Te dicen, hey, se acabó. No más zapateros, no más lustradas feroces, no más remaches. NO MÁS. Let me go, hon. Y nos cuesta la vida hacerlo, entonces no los botamos sino que los ponemos en el closet "por si acaso", hasta cuando llega ese maléfico y muchas veces postergado día en el que uno tiene que "ordenar" el ropero, los ves de nuevo y te preguntas cómo has podido ponerte ese par de cochinadas en los pies, pero luego recuerdas la fiestita donde fulano y la caminadita con sutano y el bailecito con perencejo (ja, perencejo es una palabra chévere) y no los botas. Esto, que nuestras cosas nos hablen, nos ha pasado a todos, aunque existimos algunos más sensibles que otros que, además de oir a nuestra propiedad, escuchamos lo que tienen que decir las prendas de los demás. Yo tengo ese don (Algunos son políglotas, otros geniales en deportes, yo escucho lo que la ropa tiene que decir. Por algún motivo la Mamita Olga nos contaba La parábola de los talentos over and over again). En casa la ropa me habla y vaya, cómo lo hace. Me pasa en casa con uno de mis roommates (cuyo nombre no será develado porque aún tenemos esperanza de que consiga novia) el cual perdió el olfato en un accidente mientras ayudaba a niños pobres en Somalia y por eso nunca sabe cuando es momento de lavar su toalla de baño. No lo hace por sucio, de hecho es bastante cuidadoso con los detalles y con su aspecto, pero existe en él una disfuncionalidad incomprensible que le impide darse cuenta que se está secando el cuerpo casi con un ser viviente. Y entonces me toca ayudarlo. Así como el ángel Gabriel le anunció a María que estaba embarazada, yo le aviso a mi querido roommie cada vez que su toalla de baño se volvió placenta de gemelos. Y este es un proceso que hemos incorporado a nuestro diario vivir. O sea, él no se molesta cuando le digo que "Lo están buscando en el baño", sino que con toda naturalidad me dice "Qué, ¿Ya te conversó otra vez?". O sea, no hay vergüenzas, ni incomodidades. Es simplemente que los dos hemos comprendido que, bueno, sus toallas tienen mayor afinidad conmigo que con él. El otro día El Colocho (que debo aclarar, no es el dueño de las toallas perfumadas), me dio un beso en la cabeza y me dijo "Tu pañuelito me está conversando". Obviamente lo hizo por fastidiar, porque si mi pañuelito conversara, yo lo sabría. Porque yo tengo un don. ¿Ya?

27 comentarios:

El Chepis dijo...

Y pes, eres algo asi como Dr Doolittle de ropa?

Ooosea que el vestido de la Lewinsky segurito y te canta!

Miguel Rodríguez dijo...

Todos, absolutamente todos en mi familia sufren de eso.


En mi caso le sumo esta variable: le hablo a algunas partes del cuerpo.

Martín dijo...

Yo le hablo a todo, a las cosas, a las partes del cuerpo... incluso a las personas cuando están tan remotamente lejos que jamás podrían escucharme. Y tengo conversaciones fluídas y largas, muy largas, algunas muy interesantes y todo.

(Se me vino a la mente esa canción de Arjona -no se rian, no se burlen- en la que dice sola que tú que estás sin ti, conmigo...)

Rolando Escaró dijo...

yo escucho que todo lo que hay en el cuarto de mi hermano grita pidiendo ayuda...

Anónimo dijo...

Lo que tu me quieres decir es que Diosito te dio es don tan maravilloso a ti solita... pucha que lechera :).

Nos leemos.

Adriana dijo...

A mi Diosito me dio el don del olfato agudo, muy agudo... aunque a veces pienso que es un castigo
Besos

Anónimo dijo...

HAY HERMANA DESPUES DE LEER TU BLOG ESTOY CON SENTIMIENTOS ENCONTRADOS Y SUPER CONFUNDIDOS, PORQUE SI DIOS TE DIO ESE PRECIADO DON A TI, RECIEN LO HAS PUESTO EN PRACTICA AHORA EN BUENOS AIRES Y CON TODOS TUS CONVIVIENTES COLOCHOS, Y NO CONMIGO QUE FUI TU COMPA�ERA DE CUARTO POR MAS DE 10 A�OS?????, RECUERDO PERFECTAMENTE TODA LA CANTIDAD DE ROPA EN EL SILLON SUPLICANDOTE QUE LA ORDENES Y GUARDES, TAMBIEN LA CANTIDAD DE ZAPATOS REGADOS POR TODOS LADOS!!! Y COMO OLVIDAR TU MOCHILA Y CASACA DE BUZO TIRADA SIEMPRE ENCIMA DE LA CAMA!!!Y TE ACUERDAS CUANDO ENTRABAN A NUESTRO CUARTO Y TU LADO ERA TODO DESORDENADO, NI SIQUIERA TENDIAS LA CAMA!!! Y EL MIO SUPER ORDENADO???? ME ALEGRA SABER QUE DIOS EXISTE Y QUE VIVES CON TANTOS COLOMBIANOS QUE HAN HECHO AFLORAR ESE DON EN TI POR EL CUAL TANTOS A�OS PELEAMOS TU Y YO, DE VERAS QUE SI!!!!!!!!!!!SIEMPRE TE LEO PERO NO SIEMPRE COMENTO, EL DE HOY VALIA LA PENA.
MUCHOS BESOS PARA TI.
MONICA

Elmo Nofeo dijo...

De seguro que el roomie en cuestión cree que es normal que la toalla se caiga del colgador y no pierda la forma.

También ocurre que algunos pañuelos se muestran tímidos con sus dueños, por lo que si ya has sentido la tentación de usar el pañuelo como abanico, ¡LÁVALO!.

Ms. M dijo...

Jaaaaaaa! A ti te hablan las cosas!

A mi tb! Y yo tb les hablo!:P

Beso,

El Rojo dijo...

Tienes un pañuelo???

Anónimo dijo...

el problema de hablarle a los objetos es que nunca te responden los malditos. o quizá lo q ocurre es como ese silbato q solo oyen los perros y que las cosas sin alma viven en otra frecuencia.

para evitarme esas pastruladas, hablo conmigo misma (q ya es bastante, no?...aunq yo misma a veces me quedo sin respuestas)

hpereyraf dijo...

Q gracioso ... pero es muy cierto uno suele hablarles a algunas cosas ... en mi caso a las plantas cuando las riego y aquí viene lo tierno, cosa d 2 años mama murió y aunque nunca me hice el firme propósito d q ninguna de sus plantas muriera aun todas siguen vivas (hey este es material para un post!) así q a veces les hablo y todo eso ... es medio inconsciente el asunto ... últimamente le hablo a mis llaves, es q las pierdo todos los días jajaja

Anónimo dijo...

Hey! se que eres camotera con la ropa (y con los colores=Negro)pero eso de desordenada?... las veces que me infiltré en tu cuarto y por LORNAZA QUE SOY no entre al de tu hno ... tu room estaba bien ordenadito,hasta colgador de carteras tenías! Jajaja

LIA dijo...

cual es la parabola de los talentos?????

Anónimo dijo...

OYE HAY UN CONCURSO DE LOS 20 MEJORE BLOGS PERUANOS , ME PARECE QUE ESTAS DEBERIAS PONER ESE BOTONCITO PRA TUS VOTANTES :) Y TAL VEZ GANES Y ASI PUEDAS PONER MAS DILPOMAS ;) SI GANSA FACIL TE MANDAN TU PASAJE PARA LA PREMIACION SLDS

Anónimo dijo...

En esta faena de la comunicación con objetos debo advertirte del peligro de la discriminación. Concuerdo contigo en que estos objetos caseros tienen vida y hasta razonan. Debes prestarle atención a todos, como a los alumnitos de un nido e infantes. Bien lo expresó Ribeyro en una de sus prosas apátridas: "...Otros (objetos), los insociables, los réprobos, no encuentran posición ni lugar y transitan sin descanso de un espacio a otro, sin echar amarras en ningún sitio. Mal que bien, a regañadientes, terminan por aceptar una esquina y llevar allí una vida que yo adivino plena de incomodidad y resentimiento. Pero hay también los irrecuperables, aquellos que no transigen con nada, y que como castigo y que como castigo a su espíritu subversivo son reducidos en el fondo de un cajón o en la oscuridad de un sótano. Objetos terribles, condenados, que deben estar tramando en silencio alguna venganza atroz" Lo de la toalla...simplemente extraordinario.

Anónimo dijo...

En esta faena de la comunicación con objetos debo advertirte del peligro de la discriminación. Concuerdo contigo en que estos objetos caseros tienen vida y hasta razonan. Debes prestarle atención a todos, como a los alumnitos de un nido e infantes. Bien lo expresó Ribeyro en una de sus prosas apátridas: "...Otros (objetos), los insociables, los réprobos, no encuentran posición ni lugar y transitan sin descanso de un espacio a otro, sin echar amarras en ningún sitio. Mal que bien, a regañadientes, terminan por aceptar una esquina y llevar allí una vida que yo adivino plena de incomodidad y resentimiento. Pero hay también los irrecuperables, aquellos que no transigen con nada, y que como castigo a su espíritu subversivo son reducidos en el fondo de un cajón o en la oscuridad de un sótano. Objetos terribles, condenados, que deben estar tramando en silencio alguna venganza atroz" Lo de la toalla...simplemente extraordinario.

r4ndom dijo...

laurita de mi corazón....quid pro quo

ya sabes por quien votar en la categoría: deportes

puremasacre.blogspot.com

GINNA dijo...

ME HE REIDO UN POCO, ME GUSTA LO QUE ESCRIBES.

GINNA dijo...

ME HE REIDO UN POCO, ME GUSTA LO QUE ESCRIBES.

Anónimo dijo...

querida laura que categortia es tu blog ?? , tienes un voto mas¡¡¡¡
fan blog lectora :)

Nelly dijo...

jajaja q pensaran mi zapatos marrones, ya estan viejitos pero todavia los guardo.

Besos

Laura Zaferson dijo...

chepster, no sólo de ropa. de las cosas en general. ayer medio tomate me pidió que lo cocinara o ayudara a suicidarse porque ya estaba acercandose al proceso de putrefacción.

cajonero... y que le dices? "buen chico!" jajajaja

martin, creo que es casi normal. :)

digler... pero... y por qué no le dices!??!

pere... me encanta la palabra lechera. es super nuestra. es linda. :)

adriana... pues si, depende. a vece es ewwww y otras es hmmmmmm.

mona, el post habla de la ropa que huele mal, no de la que está desordenada!! :-p

elmo... está limpio!

ms. m... un dia hagamos una reu con nuestas cosas. jajaaj.

el rojo... tengo varios.

saltamontes... si contestan! jaja

lemon guy... que linda costumbre. :)

ytala... mi hermana es asi... ella inventa. jaja.

lia... ay lia!! anda busca tu nuevo testamento por favor. que tal lisura.

anónimo... gracias x el aviso!

niebla... que interesante tu comment! :D

ivo de mi vida, done it already hun. :)

anónimo... es blog personal! justo lo puse a propósito de tu avispada consulta. :) gracias!

ginna... hey, muchas gracias x leer! :D

nelly... pues si, preguntales a ver. :)

Anónimo dijo...

prima, me he dado cuenta que tus blogleyentes son esquizofrénicos... :-D

Laura Zaferson dijo...

kike... jaja, nah.

Anónimo dijo...

desde luego para escribir sí tienes un don

bs

Laura Zaferson dijo...

AyL... ¡muy gentil! ¡gracias!