miércoles, agosto 13, 2008

Menos complicado es ser réptil.

El otro día, mientras tomaba una ducha obscenamente larga (y uso el término pues para mí, todo lo sabrosamente excesivo es sin duda obsceno más allá de lo naive que pueda ser. O sea, este paréntesis es para que le hagan "delete mental" a todos los patitos de hule con epilepsia y esponjas con ventosas de ultra succión que seguramente ya han alucinado que tienen que ver con la duración de los baños de la que suscribe). Bueno, la cosa es que ese día estaba pensando en las versiones paralelas de vida que las personas llevamos a cabo. Todos cerremos los ojos por un instante y volvamos al cole. La profesora dice: "¿Qué hacen los mamíferos?" y nosotros, como parte de una manada alucinada de niños que sólo quieren ir al recreo decimos: ¡NACEN, CRECEN, SE REPRODUCEN Y MUEREN! Un momento. Este pequeño ejercicio de regresión es imposible de realizar. Si cerramos los ojos... ¡No podemos leer! Jajaja. A lo que voy es que, a nosotros, como mamíferos y según la clase de ciencias naturales, nos corresponde: Nacer, crecer, reproducirnos y morir. ¿Y qué hacemos nosotros? Pues lo que nos da la gana.
  • Están los apuraditos, que nacen, ahí no más se reproducen y como consecuencia CRECEN. Luego, al ver lo que han reproducido y lo que les espera, se mueren. ("Estos son los que queman etapas pues", diría la Mamita Olga)
  • Están los que nacen y no llegan a crecer, pues se vuelven emo y por consiguiente saltan todos los pasos hasta llegar desesperados y posesos al momento en el que mueren (Woo Hoo!).
  • Están las Susanitas, que ni bien nacen quieren reproducirse por montones y armar un equipo de fútbol completo (dos equipos si hablamos de fútbol 5). Morir es un temor constante, porque en ese caso los cotejos familiares quedarían sin arbitro, entrenador, porristas, etc.
  • Están los que crecen antes de nacer. Esto parece imposible pero, con la degeneración de la comida chatarra y demás porquerías tan dañinas como sabrosas, cada día es más común que un mamífero del tipo humano tenga que ponerse a dieta antes de haber realizado la primera mudanza de su vida: De Utero Street a Incubadora Boulevard, that is.
  • Existen también los raritos, aunque en menor cantidad por supuesto, como todo lo "raro", que son los que nacen, crecen, no desean reproducirse y tampoco piensan en el aspecto muerte. (Acá estoy yo. O sea, me gustan los niños, pero no quiero tenerlos, y no pienso en la muerte porque... bueno, ¡Porque prefiero pensar en la vida!). Esta gente es medio mal vista, pues si todos pensaran igual, nos acabaríamos como especie. Felizmente, mi estimación es que hay un "rarito" por cada millón de Susanitas (Esto carece fundamento alguno, but then again, nada de lo vertido en este blog lo tiene). Así que las amigas directoras de jardines de infancia no deben temer por la perdurabilidad de sus negocios.

Y seguro hay más versiones y tipos o "calidades", como le gusta decir a un terco escribidor al que estimo en demasía. La cosa es que mis duchas extendidas son una delicia, pues no sólo pienso en estos temas sino que, además, mantengo la piel súper hidratada.

8 comentarios:

Ferro (F3!) dijo...

Lau, todo lo que tiene arroba "suanit@" queda como un mail, fijate en eso, y en desocupar el baño rápido.

Sería bueno que te reprodujeras... pero en una clonadora!!!

AntonellaB. dijo...

mi ducha me decepciona. No es màs que un vehiculo para limpiar pieles

hpereyraf dijo...

Me declaro miembro de los raritos jajaja y como sono eso ... en si adoro a los niños pero x mi obvia condición no pienso en reproducirme .. para afectos mis sobrinos y punto.

Anónimo dijo...

Patito de hule con epilepsia...ajajajajajajajajajajja (qui buiiiinaa).
Hablando más seriamente (pero nunca tanto), hay una cualidad de los mamíferos humanos que está tan arraigada que ya constituye parte de su naturaleza, pero en primaria no nos lo dicen; MATAN. La categoría de raritos a los que te refieres es, lamentablemente, de menor tamaño que esta nueva categoría, osea, los que además de todas las acciones mamíferas, también MATAN. La pregunta, no será una facultad divinamente instalada en nuestra naturaleza para contrarrestar el efecto negativo de las Susanitas? Si no existieran estos genocidas, asesinos y criminales, y estuviéramos sólo a merced de las Susanas del mundo, posiblemente se habrían agotado ya las reservas naturales de agua, el maiz estaría más caro que el petróleo y nuestra inflación por la carestía de alimentos estaría por encima de 40%. Pero no me tomen en serio, sólo me gusta jugar con los pensamientos más perversos. Adoro la vida y a los vivos. Como dicen los de Cold Play: "Viva la Vida". Buen post.

MissLima dijo...

uy yo tambien soy "rarita" y no me gustan los ni;os por mas de media hora (y eso los escogiditos).

Laura Zaferson dijo...

ferro... uy no, luego quien nos aguanta!

antonella... ay pero eso es lo mejor!! hay unas que no tienen potencia y no pasa nada.

lemon guy? tu condición? ja, puedes tener hijos siendo gay. :)

misslima... jaja, a mí si me gustan!

Laura Zaferson dijo...

Niebla, esoty de acuerdo con tu punto. El mundo no se acaba, nosotros lo estamos terminando. Pd. Y sorry otra vez! :)

Laura Zaferson dijo...

Niebla, esoty de acuerdo con tu punto. El mundo no se acaba, nosotros lo estamos terminando. Pd. Y sorry otra vez! :)