Me gustas cuando callas porque estás como ausente.

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El otro día me fui a visitar al doctor. Ocurre que tengo una serie de males que duran poco y no se explican (Hipocondriaca? Tal vez), y entonces la mamita olga dijo BASTA YA y me arrastró hacia el especialista en medicina interna. Después de todo lo que le conté, el amigo doctor dio su veredicto: Señora, es probable que su hija tenga bichos. "Bichos?" pensé de inmediato. "Cómo voy a tener bichos doctor?". "Lo que pasa es que, según me cuentas, comes muchas verduras y tomas agua del caño... y bueno, esto puede ser causa de los dolores que tienes". Procedí a replicar que he tomado agua del caño durante toda mi vida. "Hijita, los bichos pueden vivir dentro de ti durante mucho tiempo y formar incluso colonias antes de manifestarse. Lo que vamos a hacer es pedir que te hagan algunos exámenes". Me dejó pensando la idea de tener millones y millones de bichos en la panza. Cómo sería? Por qué estos caballeritos no me habían avisado que vivían dentro de mí? Y ahora cómo los mato? Y si son familias? El doctor interrumpió mis vuelos mentales para indicarme 3 exámenes: Sanguíneo, Coprológico y Ecografía de Abdomen Completo. Al sanguíneo estoy acostumbrada (mi mamá siempre me hacía sacar sangre para saber si el no comer carne me estaba volviendo anémica), el cropológico no sabía que era (luego me dieron un frasquito y me indicaron que -de alguna forma- debía devolverlo con una pequeña cantidad de pupu de la tía lauris. (EN OTRO POST ME EXPLAYARE SOBRE TAMAÑA PERIPECIA) y por último la ecografía de abdomen completo. Y en esta última es donde termino siendo tremendamente dejada sin palabras.

Volví un día domingo para hacerme la famosa ecografía. Demás está decir que la sala de espera estaba llena de embarazadas y sus esposos. Me senté y me puse a imaginar como las mujeres en dulce espera estarían pensando en aquella mujer EMBARAZADA Y SOLA que estaba sentada junto con ellas. "Seguro están sintiendo penita por la madre soltera que no tiene con quien ir a sus controles... Qué les importa digo yo? Acaso una mujer no puede ser madre soltera? Yo no le voy a dar pena a nadie!" seguía yo inexplicablemente pensando. Después me di cuenta que en realidad nadie me estaba mirando y dejé de imaginar cosas. (Esa sala de espera es un spot chévere para pensar cosas ah?) Pero bueno, no nos desviemos del tema (Toda la vida me desvío no? jajaja). Entré a la sala de las ecografías, me acosté en la camilla y me pusieron el famoso gel frío en el estómago. Cómo me habían hecho tomar miles de vasos de agua sentía que iba a explotar... y encima el doctor me iba indicando lo que veía dentro de mí y lo señalaba con esmero en la pantallita negra... pero la verdad yo sólo veía lo que se asemejaba a una gran cantidad de fugde. De pronto el doctor me preguntó: "Hijita tu tienes niños?". "No doctor". "Y has estado embarazada?" "No doctor". "Hmm... pues vaya, debo felicitarte, tienes un utero de gran tamaño". Y bueno, yo guardé silencio durante un minuto entero y luego dije. GRACIAS DOCTOR.